Preservar las películas caseras con historias de la familia, pero enterradas en cintas VHS que se descomponen rápidamente, es un problema que algunos piensan que no tiene solución. La verdad es que existen métodos que permiten convertir esas viejas cintas en archivos digitales modernos.
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Si tiene planes de digitalizar esas viejas películas caseras, te presentamos la mejor opción para elegir. La conversión de películas caseras puede ser un proceso simple y bastante económico, solo que necesitas algo de tiempo y dedicación.
Las herramientas importantes
Estas son las herramientas que necesitas tener a la mano para digitalizar las cintas VHS:
– Una videograbadora con sus conectores compuestos de video y audio. La mayoría de los modelos tienen, pero asegúrese de saber que funciona bien.
– Un convertidor de video USB compuesto.
– Una computadora con un puerto USB disponible. Además, necesitará un dispositivo que ejecute al menos Mac OS X 10.6.8 o Windows 7.
– Tiempo y horas libres porque el proceso lleva su tiempo.
El paso a paso
Ahora, prepárate para digitalizar las cintas de VHS:
– Primer paso: asegúrate de descargar e instalar el software del convertidor en la computadora. Elgato’s Video Capture , es el más recomendable
– Después de esto, conecte la computadora a la VCR (videograbadora) usando el convertidor de video USB. La mayoría de los digitalizadores de consumo basados en USB tienen una selección similar de enchufes en un extremo para usar con la videograbadora; un conjunto de cables compuestos (rojo, blanco, amarillo) y S-Video.
– Rebobine la cinta VHS al lugar donde desea iniciar la conversión, presione reproducir en su videograbadora y luego presione grabar en su computadora. El proceso de conversión se ejecuta en tiempo real, por lo que puede salir y hacer otra cosa mientras espera que la cinta llegue a su fin.
– El software convertidor de Elgato le permite recortar el video a su gusto. Cuando haya terminado, exporta automáticamente un archivo de video .MP4 a su carpeta de películas. También le permite subirlo directamente a YouTube o exportarlo a QuickTime Player o iTunes.
– Es recomendable hacer una copia de seguridad de los archivos convertidos, ya sea en una unidad externa o en un servicio en la nube, para que no se eliminen por accidente.