El mundo del entretenimiento amaneció con un golpe directo a la nostalgia: Cary-Hiroyuki Tagawa, el actor que inmortalizó a Shang Tsung en Mortal Kombat y uno de los villanos más poderosos de la cultura pop, murió a los 75 años en Santa Bárbara, California, tras complicaciones derivadas de un derrame cerebral.
La noticia fue confirmada por The Hollywood Reporter, medio que también compartió las palabras de su representante y varios detalles de su vida artística.
¿Quién era el actor Cary-Hiroyuki Tagawa, villano de Mortal Kombat?
Para quienes crecieron repitiendo “Your soul is mine”, Tagawa no fue solo un antagonista de película, sino el sello indeleble de una franquicia que revolucionó el cine y los videojuegos de los noventa. Su interpretación, que debutó en 1995, se volvió tan icónica que los fans lo adoptaron como la imagen definitiva del villano, incluso cuando otros actores intentaron ocupar su lugar en adaptaciones posteriores.
Pero encasillarlo únicamente en Mortal Kombat sería reducir una carrera que comenzó mucho antes. Su primer salto fuerte llegó con El último emperador en 1987, cinta ganadora de nueve premios Oscar. Desde ahí, su rostro se volvió habitual en producciones de acción, ciencia ficción y drama. Participó en títulos como Licencia para matar, El planeta de los simios, Memorias de una Geisha y Tekken. En televisión dejó huella en series como Man in the High Castle, Teen Wolf, Revenge, Hawaii, Star Wars: Rebels y, más recientemente, Blue Eye Samurai.
Tagawa nació en Tokio y creció entre bases militares estadounidenses, lo que lo llevó a recorrer distintos estados antes de instalarse en Los Ángeles. Ahí empezó su carrera mientras enseñaba Chu Shin, disciplina marcial que desarrolló él mismo. En sus últimos años eligió una vida tranquila en Kauai, Hawái, junto a su esposa Sally, lejos del ruido mediático que alguna vez lo rodeó.
Su representante, Margie Weiner, expresó el vínculo que formaron a lo largo de los años y compartió un mensaje que evidencia la cercanía que mantuvieron: “Tuve el privilegio de representar a Cary-Hiroyuki Tagawa durante muchos años como su representante, pero nuestra relación se convirtió en algo mucho más profundo: se convirtió en parte de la familia”, dijo en el comunicado.
Su partida deja un vacío entre generaciones enteras que crecieron con su mirada desafiante y la frase que, hoy más que nunca, resuena como un eco cultural: Tagawa no solo interpretó a un villano… se convirtió en una leyenda.

