La vida de Nevvy Cakes cambió en un abrir y cerrar de ojos, pues pasó de no tener un hogar a ganar 90 mil dólares al mes, todo gracias a la creación de contenido en sitios de adultos, como OnlyFans.
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Desde la comodidad de su hogar, la chica elabora fotos y videos, con los que obtiene buenas ganancias gracias a la plataforma.
OnlyFans la sacó de su miseria
La joven de 21 años tenía serios problemas monetarios, pero encontró en OnlyFans una solución a ellos, pues sus poses sexis la han ayudado a que muchos usuarios compren sus imágenes.
“Estaba sin hogar en Jacksonville, Florida, donde me crié y crecí. Hasta los 12 años me crió mi mamá y luego mi abuela. Mi madre era abusiva y luego dormíamos sofá tras sofá, cuando yo era más joven”, relató en entrevista para The Daily Beast.
Su familia siempre fue de escasos recursos, por ello no tuvo la oportunidad de tener una adolescencia normal.
De hecho, por algunos meses, contó con una casa propia, pero su madre no logró mantenerla, por lo que al poco tiempo tuvieron que mudarse y comenzar una vida sin estabilidad.
Durante el arranque de la pandemia por COVID-19, Nevvy encontró la solución a su situación financiera, por lo que comenzó a incursionar en la plataforma, vendiendo material que le daría ganancias al poco tiempo.
“La pandemia estaba a punto de ocurrir y me estaban saliendo quistes muy malos en los ovarios. Realmente ya no puedo trabajar. No puedo levantarme de la cama la mayoría de los días. Una chica vino a mi trabajo hace un tiempo y me dijo: ‘Eres demasiado bonita para trabajar aquí. Prueba OnlyFans’. Ni siquiera sabía qué era eso”, detalló.
Dejó su trabajo y se enfocó en vender contenido para adultos
Esta chica que apareció en su trabajo le abrió una oportunidad única, pues le comentó que ella ganaba 15 mil dólares por mes.
Cakes no lo dudó, pero antes apareció un hombre que la quiso marear y meter a trabajar en una red de tráfico sexual, aunque no cayó en su trampa.
Luego comenzó a incursionar en el contenido de adultos, pues en Snapchat muchos usuarios le pedían fotos desnuda, fue ahí donde entendió que podía ganar mucho dinero si se mudaba a una plataforma especializada.
“Mientras esto sucedía, tenía un Snapchat y estos tipos seguían pidiéndome desnudos, y dije: ‘Está bien, ¿sabes qué? Cinco dólares por una foto de mis senos’. Él me envió el dinero. Envié la imagen con emojis en mis pechos. Dije, si quieres ver sin emojis, envíame $50, y él me los mandó. En ese momento, tenía como 20 dólares en mi cuenta bancaria”, comentó sobre su primera experiencia.