Llevaba tiempo sin escribir nada y ya Andrea me había regañado, así que volví a darle el morbo que les gusta a ustedes, los cacos. Ustedes saben que cuando “El Gnomo” escribe es porque viene mucho odio.
Bueno. Vamos allá…
Baby Rasta y Gringo son estas leyendas de la música urbana. Sus éxitos se remontan a cuatro canciones: La Cuarenta, Un Deseo, Me Niegas y La 40, pero sin Gringo, porque Rauw [Alejandro] y Baby Rasta entendieron que iba a dañar la canción con su delivery flojo.
Todos los dúos tienen uno que es el duro y el otro que hay que cargar pa’ que no se apague y le llegue un chequecito.
Cuando Gringo empezó a salir en el pódcast de Molusco, yo decía: “Mano, tiene que estar c*brón ser Baby Rasta y ver a tu compañero matar el legado y la marca que por años trataron de mantener en la posición como uno de los dúos más longevos y respetados”.
No los respetaban por su música, sino por los años que llevan sin pegar un tema. Aun así, hacían sus parties y se mantenían dentro de una conversación en la cual la gente se las daba sin tener que hacerlo.
Recientemente, salió la polémica de los dúos. En mi opinión, Plan B no tiene competencia. Sin embargo, cuando hablamos de éxitos mundiales, longevidad y relevancia, hay que quitarse la gorra ante la existencia de Wisin y Yandel.
Yo puedo entender a Baby Rasta y su frustración de que no lo invitaran para la casita. Están tratando de tirar las últimas balas de la relevancia antes de que se tengan que retirar. Ustedes ven a Baby Rasta con bótox, pero Rasta es contemporáneo con Jacobo Morales, René Monclova y Ozzy Osbourne.
Hay que dársela a Gringo en algo: tener que sentarse por cuatro horas con Molusco y Gallo [The Producer], pretendiendo que te caen bien estos c*brones. Se puede entender, porque Gringo siempre fue una sombra diminuta dentro del dúo y, por primera vez, se siente como protagonista. No lo es, porque Gallo es el que le hace los manda’os a Molu. Pero al menos siente algo de protagonismo, le hacen dos chistes y le dan permiso a que salga una vez al mes en pódcast que terminan engavetando 🥃.
Baby Rasta y Gringo serán reconocidos como los artistas que destruyeron un estatus de leyenda por estar payaseando en las redes. Esto nos enseña que no toda publicidad es buena y, aunque la libre expresión debería existir para siempre, a estos dos hay que quitarles las redes por su propio bien.
—Yamil Pérez “El Gnomo”IG: @yamilpo

