En algún lado de las Sagradas Escrituras aparece alguito ahí de dar la otra mejilla cuando te dan un bofetón o algo así. Pérate, que también hay algo de Jehová dando y quitando y un par de gerundios más.
Ah, Job 1:21. Mejor, que la siervita Tata, que mañana comienza sus últimos meses como representante, nos lo recuerde:
Pues sí. Tuits como estos levantó la incógnita: si los federicos tienen el teléfono de Tata, ¿cómo pudo tuitiar eso?
Ante esto, el magno comunicador Molusco se dio a la tarea de ensamblar un equipo de la bondad compuesto por todos los que, como él, han sido bloqueados por Tata con el siguiente llamado:
De inmediato, se unieron todos los poderes:
Esperamos que ante este noble gesto de los tuiteros que están bloqueados, representados en la robusta figura del señor Molusco, Tata finalmente se entere de los resultados de estas primarias.