Todo por no ponerse la vacuna…
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Un hombre de 50 años que nunca fue a la clase ciencias, se puso un brazo de silicona para asistir a un centro de vacunación en Italia y así obtener un certificado de vacuna sin vacunarse realmente.
Sin embargo, este genio fue descubierto por la enfermera cuando estaba a punto de administrarle la vacuna en Biella, Piedmont.
La enfermera le dijo a CNN que notó algo “anómalo” en el brazo del hombre y que de momento pensó que tenía una prótesis.
Pero el mismo señor le confesó a ella su propósito de engañarla para obtener la tarjeta de vacunación. Esto enfadó mucho a la enfermera quien lo catalogó como una falta de respeto a su profesión y todos los trabajadores de la salud que estaban allí.
“Al principio me sorprendió, luego me enojé, me sentí ofendida profesionalmente, él no mostró respeto por nuestra inteligencia y nuestra profesión”, dijo la enfermera Filippa Bua a CNN.
El gobierno de Piamonte en Italia ha condenado el intento del hombre de engañar a la enfermera.