Después de la decepción con Game of Thrones, HBO encontró su verdadera salvación en Chernobyl. Una de las mejores mini-series que se hayan visto en los últimos años.
El furor por el drama brutal de esta producción llegó a tal grado que turistas e influencers no pudieron evitar la tentación de visitar las ruinas de la zona de exclusión. Esa región urbana que tuvo que ser evacuada y que se ha mantenido abandonada desde hace décadas por los latentes niveles de radiación.
Craig Mazin, creador de la serie y guionista meticuloso de cada episodio no pudo guardar silencio y se manifestó públicamente en su cuenta oficial de Twitter. Condenando la actitud de estos individuos y pidiendo respeto por la tragedia que sucedió ahí:
El Hollywood Reporter afirma que desde el estreno de la serie, el número de visitantes al sitio, cerca de la ciudad de Pripyat en Ucrania, han aumentado entre un 30 y un 40 por ciento.
Muchos de ellos han sido influencers o usuarios de redes sociales con la intención de llegar a la fama. Por lo que han buscado tomarse fotografías de forma creativa, o hasta casi pornográfica con las ruinas radiactivas de fondo.
Con todo y el riesgo para la salud que implica. Para darse una idea aquí una breve galería de la inteligencia humana: