Estimada Alexandra,
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Desde la semana pasada estaba bien emocionado porque me habían dado la noticia de que iría a los estudios de Telemundo para hacer mi gran debut en la televisión, sin embargo, no me dieron muchos detalles de lo que allí estaría pasando. Estuve varios días pensando que me pondrían a tomar clases de dicción para ser un gran reportero ancla como Jorge Rivera Nieves o que me dejarían cantar en el karaoke de Puerto Rico Gana con Alex DJ y de una le tiraría un llora’o sobre la finca en la que vivo y le pediría 500 pesitos.
Cuando llegó el gran día me pusieron mi pañuelo y me llevaron hasta Hato Rey donde de lejos vi por primera vez el edificio de Plaza Las Américas y luego la “T” roja grande de Telemundo. Ahí fue donde me puse nervioso y me empecé a hacer caca...
Entré a los estudios del canal y vi esos famosos pasillos de mármol, me encontré con Roberto Cortés que me pichó, pero él estaba más pendiente al huracán ese que anda por el Atlántico así que no lo tomé personal. También pude ver a Susa y Epifanio jartándose a carterazos y eso fue una experiencia religiosa.
Te voy a ser bien sincero, yo pensaba que me estaban llevando al canal para ser entrevistado por Zugey Lamela y contarle sobre un problemita ahí que tengo con un burro que me quiere tumbar parte de los terrenos que tengo en la finca y ver si Telemundo responde de verdad.
Pero no, allí estaba yo entrando al estudio de Alexandra a las 12 y me llevé la sorpresa de que se pusieron a hablar de mi problemática relación amorosa con Milagritos. Alexandra, perdona pero te pusiste bien majadera a contar el bochinche de cabros que tenemos nosotros acá por eso me oriné primero para ver si tumbaban el vacilón pero siguieron. Después les dejé la sopresa mayor, la que tuvieron que barrer y ojalá haya sido Herbert Cruz el que lo barrió porque era el más que se estaba riendo.
Te cuento, Milagritos y yo tenemos una relación muy seria desde hace años, hasta que llegó Faustini...un cabro guaynabito que se cree más cabro que todos nosotros. En la finca tienen favoritismo por él y por eso me quieren buscar otra cabra para que yo me olvide de Milagritos, pero eso no será así.
Ahora que yo soy una estrella de televisión -aunque sea por cagón-. Faustini va a tener que apretar y lo único que lo haría ganarme es que salga como invitado en el segmento de Men & The City de Raymond y sus Amigos.
