El calendario ya marca 1 de julio, lo cual implica que ya estamos entrando a la segunda mitad del año. Y que año interesante ha sido hasta el momento: la guerra en Ucrania, la inflación sigue afectando como compramos los productos que necesitamos, siguen sacando alcaldes por corruptos, LUMA continúa subiendo la luz, Pierluisi sigue pensando que todos somos igual de ricos que él y la Junta aprobando el presupuesto después de una pelea de boxeo entre Dalmau y Tatito que parecía una discusión entre fanáticos de Bayamón y Ponce. Pero entre todo este revolú, tenemos el cine para alejarnos de la vida diaria y aventurar/simpatizar con los problemas que los personajes tienen que enfrentar para echar hacia adelante; algunos fantásticos y otros que tocan temas que reflejan nuestra sociedad. Como todo año, hay algunas que los hacen mejores que otras y, por ende, nos comprometimos a montar la lista de las mejores y peores películas que han estrenado en el 2022 hasta el sol de hoy.
Aunque todavía nos falte la segunda mitad del año que incluye películas como Thor: Love and Thunder, Nope, Bullet Train, Halloween Ends, dos versiones diferentes de Pinocchio, Don’t Worry Darling, Black Adam, Black Panther: Wakanda Forever, Creed III, Shazam: Fury of the Gods y Avatar: The Way of Water, al igual que otras que podrían estar nominadas para los Óscars, entendemos que ya tenemos material suficiente para componer una lista de este calibre. Como toda lista que recopila lo mejor y lo peor del año pasado, esta es mi opinión sincera y no la lista definitiva de todos los tiempos. Se sabe que hay personas que tienen opiniones diferentes y eso está más que bien porque todas las películas son subjetivas.
Ahora, comencemos con las peores:
Las peores
Menciones despreciables: Senior Year, Elvis y Father of the Bride
5. Jurassic World: Dominion
Jurassic World: Dominion es una experiencia muy desdentada. Por mucho que pueda defender varios elementos de la película, como los efectos especiales y la mezcla del trío de Jurassic Park con el dúo de World, en general se sintió como una experiencia decepcionante. El equipo creativo detrás de la película no solo ignoró por completo lo que habían establecido en la película anterior, Fallen Kingdom, donde los dinosaurios ahora corren desenfrenados por todo el mundo (ya sabes, la película en la que la mayoría de la gente estaba interesada y que nos prometieron en los trailers), sino que también decidieron hacer dos tramas dispares: una aventura ecológica con el trío original de Laura Dern, Sam Neill y Jeff Goldblum y la otra es Taken with dinosaurs protagonizada por Chris Pratt. Pero su mayor ofensa es lo hueca que es. Lo que se exacerba cuando otra secuela heredada, destacada más adelante en este artículo, se convierte en una experiencia tan cinematográfica y satisfactoria que no puedes dejar de pensar en cómo es hora de que la franquicia Jurassic debe de convertirse en un fósil.
4. Deep Water
Si un drama erótico es en realidad/absolutamente graciosa, ¿continúa siendo parte de dicho género? No, ni por asomo. Y eso es lo que obtuvimos con Deep Water. La película, que se supone que es sexy e intrigante, no fue erótica en lo absoluto, lo que hace que las insípidas películas de Fifty Shades parecieran sacadas de PornHub. Los elementos del thriller fueron tan fascinantemente estúpidos que cuando la película alcanza su clímax absurdo, no puedes hacer nada más que reírte de lo estúpido que resulta todo. Realmente tienes que preguntarte cómo dos de los actores más sexys trabajando activamente en la industria, Ben Affleck y Ana de Armas (quienes salieron en la vida real después de que concluyó la producción) podrían tener cero química sexual y amorosa. Sin embargo, Deep Water responde a dicho pensamiento, y peor de lo que te puedas imaginar.
3. The Man from Toronto
The Man from Toronto encontró una manera de convertir a los generalmente encantadores Kevin Hart y Woody Harrelson en personajes de madera. La película está filmada y editada con pereza, como una persecución de autos que se siente como una pila de material de archivo. Incluso hay una escena en la que una secuencia de acción de cinco minutos se supone que se sienta como una sola toma, pero del lado del público puedes comenzar un juego de beber, ya que puedes contar la cantidad de veces que se empalma esa “toma”. Sin embargo y peor aún, aunque Deep Water fue involuntariamente graciosa, The Man from Toronto es todo lo contrario: se supone que debe hacerte reír durante su tiempo de ejecución, y falla constantemente durante su tiempo de ejecución.
2. Morbius
Hay una película fuerte en algún lugar dentro de Morbius. Desafortunadamente, parece que lo sacaron en la sala de edición porque esta película es un desastre absoluto. Aunque muchos querrían culpar a Jared Leto de ser la razón por la que esta película no funciona, eso apenas rasca la superficie. No solo está terriblemente escrita y dirigida, sino que visualmente es una de las peores cosas que he visto en los últimos 10 o 12 años. En los últimos meses, Morbius ha tenido cierto éxito en Video on Demand, pero principalmente porque es el hazmerreír del género de los cómics en la pantalla grande. Afortunadamente, parece que Sony Pictures ha entendido que esta película merece una estaca en su corazón.
1. The Ice Age Adventures of Buck Wild
Es interesante ver cómo Disney, una compañía de entretenimiento que probablemente tiene más dinero que Ozymandias, el Rey Midas y Dios juntos, fue hasta los rincones más recónditos de su propio barril de propiedad intelectual para desenterrar un spin-off (a bajo costo) de Ice Age y la estrenó a través de Disney+ a principios de año. Si bien el estudio ciertamente ha enviado películas animadas de calidad como Soul, Turning Red y Luca (varias de estas debido a la pandemia) a su plataforma de transmisión, The Ice Age Adventures of Buck Wild se siente como una estratagema por dinero debido a que tiene una franquicia reconocible a la vanguardia, pero carece de cualquier tipo de animación hermosa por la que el estudio es conocido a través de sus subdivisiones Walt Disney Animation y Pixar. Sin embargo, incluso peor que eso, esta película es dolorosamente blandengue y lamentable aburrida. Es por esto que es definitivamente la peor película de la franquicia y (al menos hasta ahora) la peor película del año.
Las mejores
Menciones honorables: The Fallout, Lightyear y X
5. The Unbearable Weight of Massive Talent
Esta es una película que probablemente no estará entre las 10 mejores del año cuando todo esté dicho y hecho. Sin embargo, Unbearable Weight of Massive Talent es una de las películas más divertidas del año hasta el momento. Es Nicolas Cage interpretando una versión ficticia de Nicolas Cage que va a Italia para encontrarse con un super fan suyo, interpretado por Pedro Pascal. ¿Qué más se puede pedir? Esta comedia es increíblemente autorreferencial; cuanto más sepas/recuerdes de su carrera, más disfrutarás de la película. Sin embargo, Cage (el actor) se lo toma todo con calma mientras interpreta uno de los mejores papeles que ha hecho en el año, ya que el personaje es complejo pero agradable al público, lo cual es una síntesis perfecta y un resumen de su carrera de 40 años en un papel. Es a la vez inverosímil, particularmente cuando la película se convierte en una película de espías a mitad de camino, e íntima al mismo tiempo, pero no obstante una experiencia memorable.
4. The Northman
¿Es The Northman esencialmente otra narración de Hamlet o The Lion King con vikingos y brujas? Sí. ¿Sigue siendo una experiencia emocionante? También sí. The Northman es una experiencia cruda y visualmente hermosa que celebra el coraje masculino en su máxima expresión. Alexander Skarsgard no solo es fantástico como el personaje titular, sino que él, junto con un elenco que incluye a Ethan Hawke, Anya Taylor-Joy, Nicole Kidman y Willem Dafoe, está listo para cualquier cosa, tanto literal como figurativamente. Esta no es una película para todos, ya que no está hecha exactamente a un ritmo rápido y tiene muchas agallas volando por la pantalla. Dicho esto, si está buscando algo diferente este año, The Northman es una película fantástica que vuelve a contar una historia familiar pero con nuevos elementos.
3. Top Gun: Maverick
Es difícil concebir una película menos esencial que una secuela de Top Gun casi cuatro décadas después de la original. Sin embargo, aquí estamos y Top Gun: Maverick es una de las mejores experiencias cinematográficas del año hasta el momento. A través de un compromiso completo con la forma de grabar películas a la vieja escuela, el director Joseph Kosinski y la estrella/productor Tom Cruise encontraron una manera de hacer que esta película fuera emocionante sin la necesidad de que alguien se pusiera una capa y dispara rayos láser por los ojos. Lo que podría haber sido una triste excusa para revivir los “buenos tiempos” o simplemente un trabajo de pago para Cruise se convirtió no solo en un entretenimiento escapista para muchos, sino en una verdadera exploración de la misión dedicada de un hombre en encontrar una manera de matarse él mismo al hacer sus propios stunts... y fallar una y otra vez.
2. Everything Everywhere All at Once
La película que en realidad debería haber recibido el título Multiverse of Madness porque no hay otra manera de describir esta película, Everything Everywhere All at Once es una alegría prismática que no te deja respirar por lo enérgica que es. Esta película es, como promete su título actual: un aluvión de géneros como ciencia ficción, artes marciales, drama, comedia y fantasía arrojados a un crisol que, aunque es un poco largo con 140 minutos de duración, se combina a la perfección para hacer una película satisfactoria y memorable mucho después de que haya terminado de verla. Hacer algo tan grande y audaz, pero divertido y sincero, no es una tarea fácil. Sin embargo, los directores, Daniel Kwan y Daniel Scheinert, realmente hicieron una experiencia única que es increíblemente difícil de explicar a aquellos que no han visto la película, excepto “¡Tienes que verla! Y hablemos de eso cuando lo hagas”. No es un gran sales pitch, pero algo es algo para poder seguir expandiendo el público de esta película.
1. The Batman
Si hace diez años me hubieras dicho que alguien habría hecho una película de Batman más oscura que la que obtuvimos de la trilogía de The Dark Knight de Christopher Nolan, habría dicho que estabas loco. Sin embargo, aquí estamos y The Batman de Matt Reeves fue y sigue siendo la experiencia cinematográfica a vencer este año. Es una película que no dudarías en comparar con Se7en, Zodiac, The Silence of the Lambs o Chinatown, ya que su estado de ánimo es embriagador, su misterio es laberíntico y lo suficientemente noir como para sentirte como si estuvieras en una novela de detectives de la década de 1940. Con todo esto dicho, esta película tiene una edición de primer nivel que no se siente como si estuvieras viendo una película durante tres horas, un guión que te mantiene adivinando qué va a pasar, a quién y por qué, exquisita cinematografía de Greig Fraser y una partitura grandilocuente de Michael Giacchino que te pone en el lugar del criminal cuando ve a Batman cruzarse en su camino. Esta película es el sueño de todo fan de Batman: una versión oscura, eufórica y triunfante que enfatiza aspectos de los personajes que no son necesariamente relevantes en otras versiones. También es la mejor película del año hasta ahora.