El espigado campocorto de 6’ 1 y 185 libras, Matthew Lugo, tiene sobre la mesa un panorama muy particular: aventurarse a cumplir el sueño ligamayorista que ha alimentado su espíritu deportivo durante años o aprovechar que a sus 18 vueltas al sol puede tomarse un tiempito jugando a nivel colegial en la NCAA con los Huracanes de la Universidad de Miami, antes de dar el paso grande que todos esperan con ansias.
El lunes en la noche los Medias Rojas de Boston seleccionaron a Matthew, principal prospecto boricua de la clase del 2019 y egresado de la institución que lleva el nombre de su tío, Carlos Beltrán, en el turno 69 de la segunda ronda del Sorteo de Novatos. El valor aproximado de la selección del muchacho de Manatí, quien se convirtió en el primer boricua reclutado en el sorteo del 2019, es de $929 mil.
Metro habló con Matthew y repasó algunos detalles con el prospecto número 38 en el listado de promesas de MLB. Sepa usted que con su selección se extiende una histórica racha de reclutamientos de campocortos boricuas. Desde el 2006 al presente, al menos se ha seleccionado un campocorto puertorriqueño dentro de las primeras 10 rondas de cada sorteo.
¿Qué pasa por la mente de Matthew Lugo a casi 24 horas de su selección en el Draft?
Estoy emocionado porque Boston me drafteó y estoy disfrutándome el proceso con mi familia. Todo el mundo está muy emocionado.
¿Fue una sorpresa la selección de Boston o habías tenido conversaciones con el equipo?
Yo había tenido conversaciones con ellos, pero realmente nadie pensó que me iba a escoger Boston. Ellos son una tremenda organización, salió campeón el año pasado y ahí está Alex Cora como dirigente, que es puertorriqueño y tremendo líder. Realmente, para mí es un honor haber sido drafteado por Boston.
¿Qué equipo pensabas que te iba a firmar?
Los Diamondbacks de Arizona estaban bien interesados. También estaban los Rays de Tampa Bay y los Phillies de Filadelfia. Pero Boston nos dio la sorpresa a todos.
¿Qué has hablado con tu tío, Carlos Beltrán, quien también fue selección de segunda ronda?
Él me llamó, me felicitó y estaba bien contento. Me dijo que esto era solo otro paso en el béisbol y que hay que seguir trabajando duro, que no me desenfoque nunca.
Me dijo también que esto ahora es un proceso con muchos obstáculos y que tengo que trabajar mucho para superar todos los obstáculos que se presenten. Y eso es lo que voy a hacer.
Tú eres joven, apenas 18 años, ¿contemplas la opción de irte un tiempo a colegio?
El commitment de la Universidad de Miami es sumamente bueno. Tienen tremendo programa de béisbol.
Yo desde pequeño he querido ser un grandes ligas y ya que tengo ambas opciones sobre la mesa, pues es una decisión que tomaré en estos días con mi familia. Por ahora, me estoy disfrutando esto. Quiero seguir trabajando para llegar a la meta, que es jugar en las Grandes Ligas y próximamente decidiré.
¿Cómo te evalúas como jugador? ¿Cuáles son las herramientas que entiendes están más desarrolladas en tu juego y cuáles tienes que trabajar para ser mejor?
Yo digo que la herramienta más desarrollada es mi bateo, porque es a la que le dedico más tiempo con mi papá. Entiendo que lo que tengo que trabajar más es el fildeo. Pero creo que soy bastante atlético y que puedo seguir desarrollando en esa parte de mi juego.
¿Cuál es el ambiente con las amistades, con los compañeros tuyos y la familia?
No lo pueden creer. Están bien contentos, felices porque me cogieron en el Draft y me han explotado el celular [ríe].
Para terminar, ¿a quién le ibas en la Serie Mundial, a Boston?
Yo realmente no estuve pendiente a la Serie Mundial [ríe]. Me la pasé trabajando, mejorando las cosas mías y estudiando. No tuve mucho tiempo para disfrutarme esa serie. Pero qué bueno que ganó Boston [ríe].