Ganaron 92-4: Suspenden dirigente de escuela por no tener "compasión" en juego de baloncesto

Un juego de baloncesto femenino de escuela superior en terminó siendo una gran salsa con marcador de 92-4, lo que provocó que la directora de la institución ganadora suspendiera al dirigente por no mostrar “compasión”.

La Academia del Sagrado Corazón en Connecticut venció por 88 puntos a la escuela Lyman Hall del mismo estado, lo que generó críticas por parte de algunos que pensaron que fue una falta de respeto por parte del dirigente quien mantuvo a su equipo jugando con el mismo esfuerzo durante todo el partido, reportó The New York Times.

El asunto se hizo aún más polémico cuando la directora de la academia, la monja Sheila O’Neill, tomó la decisión de suspender por un partido al dirigente Jason Kirck.

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“La Academia del Sagrado Corazón valora las lecciones que se enseñan y cultivan a través del deporte incluyendo la ética y el comportamiento responsable, liderazgo y fuerza de carácter y respeto contra el oponente. El resultado del juego de baloncesto femenino contra la escuela superior Lyman Hall no se alinea con nuestros valores y filosofías”, expresó la directora de la escuela.

Además de ser suspendido por un partido, el dirigente de la escuela Jason Kirck, tuvo que enviar un comunicado pidiendo disculpas por el juego que ganó.

“Estoy arrepentido de mis decisiones durante el partido contra Lyman Hall”, dijo Kirck de 47 años quien tiene a dos de sus hijas en el equipo.

“Pido disculpas a las jugadoras de Lyman Hall, su dirigente y padres por la manera en que se jugó el partido. He aprendido de estas decisiones y he realizado cambios en nuestro sistema para prevenir que en algún futuro estos errores no se vuelvan a cometer”, expresó.

Durante el cuarto parcial el dirigente sacó a sus jugadoras del cuadro regular ante la amplia ventaja que ya tenían, sin embargo, nunca bajaron su nivel de juego. Algo que ha generado críticas por no mostrar “compasión” hacia el otro equipo.

El dirigente del equipo que recibió la pela, Tom Lipka, expresó que las jugadoras de Sacred Heart presionaron en la defensa durante toda la primera mitad y consiguieron robos de balón. Además, señaló que durante todo el juego realizaron rompimientos rápidos hacia el canasto y nunca jugaron en zona.