En Caguas ya no hay Solá, pero el espíritu Criollo es de Cora

CAGUAS – Ya no hay estadio Solá Morales en Caguas, pero el espíritu de los Criollos se apodera de la gente en esta tarde nublada del primer sábado de noviembre.

Los chamaquitos, por ejemplo, saben muy poco del impacto histórico de lo que viven, pero en sus miradas se manifiesta la mejor conclusión de lo que se desarrolla en esta fiesta de pueblo.

Los viejos, a su tiempo, juegan con el momento, como pasando revista de los años de oro del béisbol nacional o como recordando la energía que generaba el bate de Félix Mantilla cuando en los diamantes se dejaba el pellejo y el corazón.

Hoy (sábado), la lluvia no es impedimento para que los Medias Rojas de Boston y su dirigente boricua, Alex Cora, lleguen al Paseo de las Artes de Caguas para celebrar su noveno campeonato en las Grandes Ligas. Desde que aterrizaron en el aeropuerto Luis Muñoz Marín, a eso de las 12:20 del mediodía, el tráfico en las principales avenidas se paralizó.

Desde el puente Teodoro Moscoso hasta el expreso Luis A. Ferré el recorrido inicial estuvo cargado de emociones. La gente que hace un año detenía sus vehículos para encontrar señal en sus aparatos móviles, hoy (sábado) lo hacen para documentar una memoria mucho más enriquecedora que el golpe de un huracán devastador.

Cora, hijo prodigio de Villa Nueva, es recibido en grande porque es el primer puertorriqueño que comanda una novena ligamayorista al trono de la más importante liga de béisbol del mundo.

Hay lágrimas y también hay sonrisas entre la muchedumbre que, seguramente, alcanza las mil personas cuando el reloj marca las dos de la tarde. Todos quieren ser testigos de algo nunca antes visto. No es para menos, el béisbol es algo así como una religión en Borinquen. Es la disciplina deportiva que le dio el primer campeonato mundial a los deportes de conjunto en el país, allá para el año 1951. Y por cierto,  “El Gato” Mantilla fue parte de aquel equipo.

En medio del festín, que organizó la administración municipal de William Miranda Torres, doña Iris Amaro, madre de Cora, sigue los pasos de su hijo, que –en estos días– pasó a ser un héroe en territorio borincano y en los corazones de los fieles fanáticos de los Medias Rojas.

“La gente tiene ese corazón lleno de orgullo, pero el mío explotó hace tiempo”, dice riendo, en ruta a un almuerzo que se organizó en el Centro de Bellas Artes para el disfrute de familiares y amigos cercanos.

Antes de eso, Cora le dejó claro a su gente lo mucho que importa el respaldo que ha recibido a lo largo de su exitosa trayectoria profesional.

“El apoyo de ustedes [la gente] me hizo mejor pelotero y también mejor persona. Sin ustedes, nadie, nadie, nadie, me iba a empujar a ser lo que somos ahora”.

La tarde sigue avanzando y hay que decir que los muchachos de la lechonera “El jibarito de Chu” pusieron a comer cuerito a Cora y a su corillo, compuesto por los también boricuas Christian Vázquez y Ramón Vázquez, así como por el venezolano Eduardo Rodríguez y el dominicano Eduardo Núñez.

Había morcilla y también pitorro. Y claro, estaba el gobernador Ricardo Rosselló Nevares con su gorrita y una T-Shirt de los monarcas de la Gran Carpa. El primer ejecutivo los acompañó desde el aeropuerto.

También le llegaron al jolgorio el comediante Raymond Arrieta, el salsero Charlie Aponte y el extoletero de Grandes Ligas, Carlos Baerga.

Pero de nuevo, insistimos en la gente. Hay que hablar de los niños y de los viejos, porque viene un parque nuevo para Caguas y el Solá ya es cosa del pasado. Estamos celebrando a Cora, que fue fundamental en el “Back to Back” de los Criollos y también en el último subcampeonato del #TeamRubio.

Ya casi son las cinco de la tarde y los Medias Rojas de Cora se despiden. Luego de unas horas en suelo boricua, tienen que regresar a Boston para seguir cumpliendo con su agenda de celebración.

Antes de llegar a Puerto Rico estuvieron en el TD Garden celebrando con los Celtics. También tuvieron su tradicional parada y mañana (hoy) les toca Foxborough, para celebrar con los Patriots de la NFL.

El pueblo, mientras tanto, permanece aquí celebrando, para mañana (hoy) seguir echando pa’ lante en la #IslaBendita.